El aceite de coco tiene multitud de usos como complemento culinario, pero, además, también los tiene como producto de belleza. Son muchas las propiedades que este aceite vegetal puede ofrecer como cosmético y que podemos aprovechar para mejorar nuestra salud y nuestro aspecto físico, tanto de nuestra piel como de nuestro cabello.
Composición química:
El aceite de coco está compuesto por un 90-95% de ácidos grasos saturados, como el ácido mirístico o el ácido láurico. Esta composición hace que sea un elemento muy preciado en cosmética natural, ya que se emplea, entre otras cosas, como ingrediente viscosizante en la elaboración de emulsiones y mantecas corporales. Además aporta su especial fragancia, lo que siempre es un punto a favor a la hora de formular productos cosméticos.
Es, justamente, esta composición en ácidos grasos la que permite que el aceite de coco selle las microfisuras del estrato córneo, siendo así el aliado perfecto para las pieles agredidas, sensibles, secas y muy secas. Es, del mismo modo, ideal para la cosmética infantil
Además de los ácidos grasos ya citados hay que destacar la presencia en el aceite de coco de vitamina E y vitamina K.
Forma de extracción:
Una forma de obtención es el prensado en frío de la pulpa de los cocos (cocos nusifera) y su posterior filtración. Así, el coco se pela y se trocea a mano, para prensarlo inmediatamente, sin tener que calentarlo de manera previa. Este prensado en frío permite, además, conservar los nutrientes del fruto, consiguiendo un producto final de una mayor calidad. Se obtiene el llamado aceite de coco virgen.
Cuando el aceite virgen se clarifica a través de diferentes procesos químicos, se obtiene el aceite de coco refinado, nosotros lo llamamos neutro, en este proceso pierde su aroma y sabor.
Propiedades del aceite de coco para la piel:
Altamente hidratante
La presencia en su composición de un alto porcentaje de ácidos grasos saturados hace, que el aceite tenga una alta permanencia en superficie, lo que ayuda a reforzar la función de barrera y por lo tanto a evitar la deshidratación de la piel.
Antiséptico
La presencia de ácido laúrico otorga a este aceite propiedades antibacterianas, antivirales y antifúngicas, contribuyendo a mantener la piel libre de infecciones.
Su acción antibacteriana hace que en los productos cosméticos donde se incorpore aceite de coco, éste aporte además cierta capacidad conservante.
Antioxidante
La presencia de vitamina E contribuye a combatir los daños celulares provocados por los radicales libres, lo que protege a las células de la piel del envejecimiento prematuro.
El uso continuado de aceite de coco protege a la piel de la aparición de líneas de expresión y aporta firmeza a la piel.
Antinflamatorio
Tiene capacidad antiinflamatoria y por ello es usado como aceite para pieles sensible, muy reactivas como aquellas con afecciones cutáneas como la psoriasis o la dermatitis atópica.
Revitalizante
Aporta elasticidad y flexibilidad a la piel, es uno de los ingredientes a combinar con otros aceites vegetales para luchar contra la aparición de estrías.
Propiedades del aceite de coco para el cabello:
Altamente hidratante
La aplicación de mascarillas y acondicionadores capilares formulados con aceite de coco hidratan en profundidad el cabello.
Es especialmente interesante su uso en cabellos largos, ya que protege al cabello de la rotura, algo que se da con más frecuencia en las melenas largas.
Calmante
El aceite de coco calma las irritaciones que produce la presencia de caspa seca en el cuero cabelludo.
Anticaspa
En este caso hay que hacer referencia a la caspa grasa y a la dermatitis seborreica, que en muchos casos está provocada por la presencia de un hongo.
El ácido laúrico, contendio en el aceite de coco, tiene acción antifúngica, por lo que la incorporación de este aceite, en una baja concentración, en los champús para combatir estas dos situaciones, suele dar buenos resultados.
El aceite de coco es una fuente de la que se obtienen numerosos tensioactivos naturales que se emplean para limpiar y hacer espuma en productos cosméticos para higiene personal. Dos de los tensioactivos naturales más utilizados provenientes del aceite de coco son el Cocoglucóside y la betaína de coco.
Protector del daño capilar
Algunos estudios han puesto de relieve, que el aceite de coco presenta una alta afinidad por las proteínas presentes en la fibra capilar, en comparación con otros aceites, siendo capaz de penetrar en la misma, proporcionando un nivel óptimo de protección y regeneración de dicha fibra, lo que se traduce en el cabello sea más resistente frente al daño capilar que suponen por ejemplo el someter al cabello a las altas temperaturas del secador o de la plancha.
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